Las 10 Estrategias de Manipulación
Mediática
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Septiembre 201056 Comentarios
Artículo redactado por Sylvain Timsit,
recogido en Pressenza: ”10 Estrategias de Manipulación” de los medios:
1. La estrategia de la distracción El elemento primordial del control social es la estrategia de la distracción que consiste en desviar la atención del público de los problemas importantes y de los cambios decididos por las elites políticas y económicas, mediante la técnica del diluvio o inundación de continuas distracciones y de informaciones insignificantes. La estrategia de la distracción es igualmente indispensable para impedir al público interesarse por los conocimientos esenciales, en el área de la ciencia, la economía, la psicología, la neurobiología y la cibernética. ”Mantener
2. Crear problemas y después ofrecer
soluciones. Este método también es llamado “problema-reacción-solución”. Se
crea un problema, una “situación” prevista para causar cierta reacción en el
público, a fin de que éste sea el mandante de las medidas que se desea hacer
aceptar. Por ejemplo: dejar que se desenvuelva o se intensifique la violencia
urbana, u organizar atentados sangrientos, a fin de que el público sea el
demandante de leyes de seguridad y políticas en perjuicio de la libertad. O
también: crear una crisis económica para hacer aceptar como un mal necesario el
retroceso de los derechos sociales y el desmantelamiento de los servicios
públicos.
3. La estrategia de la gradualidad. Para hacer que se
acepte una medida inaceptable, basta aplicarla gradualmente, a cuentagotas, por
años consecutivos. Es de esa manera que condiciones socioeconómicas
radicalmente nuevas (neoliberalismo) fueron impuestas durante las décadas de
1980 y 1990: Estado mínimo, privatizaciones, precariedad, flexibilidad,
desempleo en masa, salarios que ya no aseguran ingresos decentes, tantos
cambios que hubieran provocado una revolución si hubiesen sido aplicadas de una
sola vez.
4. La estrategia de diferir. Otra manera de hacer
aceptar una decisión impopular es la de presentarla como “dolorosa y
necesaria”, obteniendo la aceptación pública, en el momento, para una
aplicación futura. Es más fácil aceptar un sacrificio futuro que un sacrificio
inmediato. Primero, porque el esfuerzo no es empleado inmediatamente. Luego,
porque el público, la masa, tiene siempre la tendencia a esperar ingenuamente
que “todo irá mejorar mañana” y que el sacrificio exigido podrá ser evitado.
Esto da más tiempo al público para acostumbrarse a la idea del cambio y de
aceptarla con resignación cuando llegue el momento.
5. Dirigirse al público como criaturas
de poca edad. La mayoría de la publicidad dirigida al gran público utiliza
discurso, argumentos, personajes y entonación particularmente infantiles,
muchas veces próximos a la debilidad, como si el espectador fuese una criatura
de poca edad o un deficiente mental. Cuanto más se intente buscar engañar al
espectador, más se tiende a adoptar un tono infantilizante. Por qué? “Si uno se
dirige a una persona como si ella tuviese la edad de 12 años o menos, entonces,
en razón de la sugestionabilidad, ella tenderá, con cierta probabilidad, a una
respuesta o reacción también desprovista de un sentido crítico como la de una
persona de 12 años o menos de edad (ver “Armas silenciosas para guerras
tranquilas”)”.
6. Utilizar el aspecto emocional mucho
más que la reflexión. Hacer uso del aspecto emocional es una técnica clásica
para causar un corto circuito en el análisis racional, y finalmente al sentido
critico de los individuos. Por otra parte, la utilización del registro
emocional permite abrir la puerta de acceso al inconsciente para implantar o injertar
ideas, deseos, miedos y temores, compulsiones, o inducir comportamientos…
7. Mantener al público en la ignorancia
y la mediocridad. Hacer que el público sea incapaz de comprender las
tecnologías y los métodos utilizados para su control y su esclavitud. “La
calidad de la educación dada a las clases sociales inferiores debe ser la más
pobre y mediocre posible, de forma que la distancia de la ignorancia que planea
entre las clases inferiores y las clases sociales superiores sea y permanezca
imposibles de alcanzar para las clases inferiores (ver ‘Armas silenciosas para
guerras tranquilas)”.
8. Estimular al público a ser
complaciente con la mediocridad. Promover al público a creer que es moda el
hecho de ser estúpido, vulgar e inculto…
9. Reforzar la autoculpabilidad. Hacer creer al
individuo que es solamente él el culpable por su propia desgracia, por causa de
la insuficiencia de su inteligencia, de sus capacidades, o de sus esfuerzos.
Así, en lugar de rebelarse contra el sistema económico, el individuo se
autodesvalida y se culpa, lo que genera un estado depresivo, uno de cuyos
efectos es la inhibición de su acción. Y, sin acción, no hay revolución!
10. Conocer a los individuos mejor de lo
que ellos mismos se conocen. En el transcurso de los últimos 50 años, los
avances acelerados de la ciencia han generado una creciente brecha entre los
conocimientos del público y aquellos poseídas y utilizados por las elites
dominantes. Gracias a la biología, la neurobiología y la psicología aplicada,
el “sistema” ha disfrutado de un conocimiento avanzado del ser humano, tanto de
forma física como psicológicamente. El sistema ha conseguido conocer mejor al
individuo común de lo que él se conoce a sí mismo. Esto significa que, en la
mayoría de los casos, el sistema ejerce un control mayor y un gran poder sobre
los individuos, mayor que el de los individuos sobre sí mismos
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